Pasantía de CCP a CIOEC Achocalla. Buen ejemplo a seguir
Saliendo de La Paz en dirección al sur oeste, tras una hora de viaje, llegamos a Achocalla que está embellecido por una laguna que lleva el mismo nombre, señala Wilder Sánchez Presidente de la CCP. En el Municipio nos esperaban las autoridades con quienes tuvimos un interesante diálogo.
El Secretario Municipal, Jacinto Oraqueni y la Concejala Mary Carmen de la Cruz Mamani, nos explicaron que tienen el propósito de ser un municipio Productivo, Ecológico y Turístico. Tres grandes aspiraciones que guían un camino que buscan alcanzar. Para ese efecto han elaborado normas en uso del derecho de autonomía que gozan los gobiernos locales de Bolivia desde que el 22 de Enero del 2010 se transformó en Estado Plurinacional de Bolivia.
Mary Carmen explica, tenemos altiplano, cabecera de valle, cabecera de valle seco. Tenemos aguas puras y sanas, buenas para producción ecológica. Nuestra producción es diversificada. Tenemos verduras y hortalizas, tubérculos, granos, leguminosas y cereales. Somos los primeros productores de leche de la provincia de Murillo. Los productores ecológicos, han sido certificados con el sello de Calidad Ecológica en el marco de la Ley 3525 que norma el Sistema Participativo de Garantías (SPG). Además existen áreas de recreación y esparcimiento así como, riquezas arqueológicas.
Los principales retos están referidos a fortalecer capacidades organizativas de la población. Fomento de capacidades productivas agroecológicas y ecoturísticas. También dinamizar mercados, comercialización y consumo de alimentos ecológicos.
Everardo Orellana, Secretario General de CCP, resalta el derecho autonómico que han conseguido las municipalidades en Bolivia.

Santusa Cuentas. Lideresa que predica con el ejemplo.
Santusa muestra con orgullo las “carpas solares” que se aprecian desde una zona alta. En el Perú le llamamos fitotoldos o invernaderos rústicos, dice Salvador Merma Hilachoque, Secretario General de la Federación Departamental de Campesinos del Cusco (FDCC).
Santusa ingresó al conocimiento de cultivar en carpas solares desde los 10 años cuando acompañaba a su mamá que fue lideresa pionera en la implementación de cultivos con cobertura. Luego estudió Ingeniería Ambiental. Optó por ejercer su profesión desde el campo, produciendo con un enfoque amigable con el ambiente, preocupándose por la nutrición natural de tierras y cultivos con el objeto de respetar el derecho de los consumidores para que tengan una alimentación sana que conserve su salud.

Explica Santusa, “en Achocalla existen 200 carpas solares a cargo de familias campesinas. Algunas miden 100 m2, otras 120 m2 y las más grandes 140 m2. Se implementó con apoyo directo del Gobierno Nacional a través de un programa del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras. Nos proporcionaron los materiales como plástico agrícola, los equipos del riego por goteo y semillas”. “Contando con las instalaciones tecnológicas, todo depende de nosotras”, resalta. “Producimos hortalizas variadas y en menor medida frutas como melón, sandía y fresas. Tenemos gallinas ponedoras y vendemos huevos”.
“El mercado nos va indicando las preferencias de los consumidores. Por eso pueden apreciar que en esta carpa solar tenemos 6 variedades de lechugas. Roja, crespa, mantequilla, entre ellas.
Elga Angulo, Secretaria de la Mujer de CCP, preguntó a dónde venden la producción. Santusa responde “lo primero es para abastecer a los hogares de las familias que tenemos las 200 carpas solares, lo cual ha mejorado nuestra calidad nutricional. Luego vendemos a una red de consumidores a quienes les proporcionamos una bolsa que contiene variedades de hortalizas con cantidades que cada una requiere. Tenemos a todas las personas enlazadas por facebook y por whatsapp. Hacemos entregas cada dos semanas. Faltando días les anunciamos lo que vamos a cosechar y las cantidades que vamos a disponer. Cada familia de la red concreta su pedido y pasan a recoger sus bolsas”.
Santusa, con notorio entusiasmo, relata que al ver que el mercado de venta en red mostraba potencialidad, decidieron invitar a los consumidores a visitar el campo y estando allí pudieron apreciar cómo se hacían los cultivos, constataron que todo era natural, que jamás se fumigaba ni ponían abonos con agroquímicos. Los consumidores hicieron la experiencia de cosechar lo que querían y prepararon juntos diversos platos. Luego de esa experiencia, los clientes se han consolidado y se han incrementado. Enfatiza que este tipo de mercado permite interactuar entre productores y consumidores para recibir observaciones y así seguir mejorando día a día.
¿Venden a otro mercado? preguntó Rebeca Azurín de Apurímac, Secretaria de Relaciones Gremiales de la CCP. Santusa dijo, tenemos una tienda ecológica que es de la Asociación de Floricultores y Productores de Hortalizas de Achocalla (AFLOPHA) donde vendemos a clientes que son comerciantes que llevan productos para revender en sus establecimientos. Estamos empezando a vender a supermercados.
William Vega de La Libertad, Secretario de Producción de la CCP, pregunta si venden productos frescos nomás o realizan valor agregado. Santusa pasó a contar que también tienen deshidratadores solares donde procesan las hortalizas y cuando están secas las muelen para hacer harina. Venden harinas para preparar tortas. La que más sale es de zanahoria, dice. Les gusta también de nabo, beterraga, espinaca. Hacemos refrescos de manzana a los que les agregamos trozos de manzana deshidratada. Gusta y nutre. Nos hemos inventado la elaboración de helados de hortalizas. Son muy ricos. Los vendemos a quienes nos visitan en pasantías, los días de feria y en la tienda de AFLOPHHA.
Los terrenos donde están muchas de las carpas solares se ubican en laderas de cerros donde predomina arena y tierra deleznable.
Este invalorable intercambio de conocimientos es promovido por COPROFAM. El apoyo de FIDA hace posible concretar esta elevación de conocimientos.



